Joaquín Prat

1927 /// 1995
Periodista

EL PRESENTADOR RÉCORD

SÒNIA VALIENTE

Doctora en Comunicación y columnista de LAS PROVINCIAS

Cuando Joaquín Prat conducía ‘El precio justo’ yo ya quería ser periodista pero todavía no lo sabía. Me fascinaba su voz radiofónica, su estética de galán de cine trasnochado y su gesto hipnótico con el que invitaba «a jugar». Pero sobre todo aquella sonrisa solar y el brillo en la mirada que poseen aquellos elegidos que aman lo que hacen. Por aquella época, finales de los ochenta, Prat debería andar por los 60 años, todo un veterano de la televisión. Recuerdo que me parecía un señor mayorcísimo al que mis padres admiraban profundamente. Lo que no me contaron es que Joaquín Prat era un comunicador brillante, de récord, prácticamente un hombre del Renacimiento de la Comunicación que hizo de todo: teatro –interpretó obras de Álvarez Quintero, Muñoz Seca y Lope de Rueda–, escribió guiones radiofónicos, lo presentó todo en este país, tanto en radio como en televisión, e incluso cayó en la tentación de grabar un disco; para los anales de la historia quedará ‘Ven a cantar’. Por estos y otros méritos llegó a atesorar dos premios Ondas y un TP de Oro.

Joaquín Prat

Las cotas de popularidad que consiguió Prat son impensables hoy en día, en el que los ‘shares’ no dejan de caer en picado y ya se propone, para calcular las audiencias exactas de las series, hacer una media con las visualizaciones ‘on line’ y las menciones de los ‘hashtags’. Era otra época. Otra tele. Otra vida. Una televisión de ‘Cuéntame’, más naíf, más estereotipada en la que salían famosos de verdad: por su arte, por el modo de ganarse la vida.

Prat conducía programas en una tele única de audiencias millonarias. Especialmente icónico, me cuentan que fue, ‘Galas del Sábado Noche’ que presentaba de la mano de una de las ‘sex-symbol’ de los sesenta, Laura Valenzuela, y por el cual desfilaron todos los artistas de este país y se descubrieron otros tantos. Entre ellos, Tip y Coll.

Un presentador de récord, como les decía, que llegó a cosechar en 1989, en plena eclosión de las privadas, hasta 17 millones de espectadores al frente de ‘El precio justo’. Un programa que otorgó también, en los noventa, el premio más elevado de la televisión en España hasta la época: 40 millones de pesetas. Qué ternura.

Lo que pocos saben es que este valenciano comenzó su carrera radiofónica en RNE en su ciudad y después pasó a la cadena SER. No fue hasta 1966 que viajó a Madrid para comenzar a fraguarse una de las carreras más brillantes en la televisión nacional, para conducir ‘Un millón para el mejor’. Faltaban pocos meses para que este exestudiante de Derecho de la Facultad de Valencia metido a artista conociera al amor de su vida: Marianne Sandberg. No importó que él ya estuviera casado, que ella tuviera 20 años y él 43. Superaron todos los obstáculos y tuvieron otros cuatro hijos. Con esta azafata de vuelo, tuvo a sus cuatro hijos menores. De ellos, tan sólo Alejandra y Joaquín siguieron sus pasos, con éxito desigual. Debe de ser, como en muchas familias de famosos, que el talento salta una generación. Caprichos de la genética.

Pero si Prat fue algo fue un trabajador incansable. Dicen que planeaba el regreso de ‘Un millón para el mejor’. La muerte lo encontró haciendo lo que más le gustaba: trabajando en un estudio de televisión.

  • Joaquín Prat Carreras (Valencia, 27 de abril de 1927 – Madrid, 3 de junio de 1995).
  • Presentador de radio y televisión conocido por los más jóvenes por ‘El precio justo’.
  • Trabajó en más de 20 programas de radio.
  • Ganador de dos premios Ondas y un TP de Oro.
  • Padre de seis hijos. Sólo Alejandra y Joaquín han seguido sus pasos en los medios de comunicación.