Músico
LA GUITARRA DE TABERNA QUE CAUTIVÓ TEATROS
DOMINGO S. TÁRREGA
Hijo de familia humilde y numerosa, un triste suceso, la caída a una acequia le condicionó toda su vida pues le produjo una grave enfermedad ocular de la que nunca se recuperó. Sus padres, por motivos económicos, se trasladaron a vivir a Castellón. Su primer maestro fue el Cego de la Marina (Manuel González) y estudió al mismo tiempo solfeo y piano con el Cego Ruiz (Eugenio Ruiz). Con motivo de un concierto de Julián Arcas, en 1860 en Castellón, para el que tuvo la oportunidad de interpretar algunas obras, éste le propuso ir a Barcelona a estudiar con él. Como luego no lo recibió, el joven Tárrega huyó de la casa en que estaba y se dedicó a tocar en lugares poco recomendables, hasta que su padre fue buscarle. Volvería a huir de casa, esta vez a Valencia, en dos ocasiones. En 1874 se matriculó en el Real Conservatorio de Madrid, donde estudió piano y armonía, pues el piano y el violín eran los instrumentos que gozaban de mayor prestigio, mientras que la guitarra era considerada un instrumento menor que sólo servía para formar parte de las rondallas y para acompañar las juergas en las tabernas.
En 1877 tuvo un enorme éxito en el Teatro Alhambra de Madrid, y a partir de aquí comenzó su tarea de devolver la guitarra a las salas de concierto. Realizó varios conciertos en diversas provincias españolas e introdujo nuevos compositores en su repertorio.
Empieza su carrera internacional: en 1880 dos conciertos en el Covent Garden de Londres; en 1881 Lyon, París, Niza, Fontainebleau, Londres, mientras seguía con sus conciertos por España. Ese mismo año se casa con María Rizo y Ribelles, renunciando a la dote de ésta. Se traslada a Barcelona, donde residirá hasta el final de sus días. En 1894 da un concierto en el Palacio de la avenida Cléber, residencia de la Reina Isabel II, después de haber realizado una gira de conciertos por Cannes, Niza, Montecarlo y en 1897 concierto en la sala Pleyel. En compañía de Walter Leckie pasa una temporada en Argelia, Alemania, Suiza.
Durante el año 1901 al romperse una uña cambia su forma de tocar haciéndolo con las yemas de los dedos, creando así una nueva técnica. Dice Llobet que «fue para la guitarra el creador de un método que abrió perspectivas totalmente nuevas en parte debido a la riqueza de sus nueva armonías, en parte debido a la belleza de su sonido, que no estaba al alcance de ningún otro y que él era capaz de producir del modo más sencillo».
En 1906 sufre una embolia que le paraliza la parte derecha y de la cual se recupera. El 15 de diciembre de 1909 muere en Barcelona, el conocido entre otros apelativos como ‘el Sarasate de la guitarra’.
De entre sus discípulos cabe señalar a Emilio Pujol, Miguel Llobet, Josefina Robledo, Daniel Fortea, Pepita Roca, Pascual Roch, Rita Brondi, Hilarion Leloup, el doctor Leckie y una legión de alumnos a los que Tárrega daba clases aprovechando sus giras y también en su propio hogar y a quienes cobraba muy poco, de ahí las penurias que pasó el maestro.
Las obras de Tárrega son universalmente conocidas; podemos asegurar que no existe ningún guitarrista en el mundo que no haya interpretado alguna de ellas. Millares de grabaciones circulan por todo el mundo, y recientemente un fragmento del ‘Gran vals’ fue el politono de una conocida marca de móviles, lo cual supone que suena millones de veces al día. Autor de más de un veintena de estudios, dos decenas de preludios, y numerosas obras originales como ‘Adelita’, ‘Alborada’, ‘Capricho árabe’ y la más interpretada y grabada del repertorio guitarrístico, ‘Recuerdos de la Alhambra’.
En palabras de Emilio Pujol, «la significación de Tárrega en la historia de la guitarra es el nuevo paso, la antorcha que ilumina el camino y el ‘micat in vertice’ que alienta hacia el futuro con ansiedad de elevacion».
- Francisco de Asís Tárrega Eixea (Vila-real, 21 de noviembre de 1952 – Barcelona, 15 de diciembre de 1909).
- Entró en el Conservatorio de Madrid en 1874, donde estudió composición con Emilio Arrieta. A finales de 1870 enseñaba guitarra y daba conciertos con regularidad. En 1880 ofreció recitales en París y Londres.
- En Valencia conoció a Concha Martínez, rica viuda que lo tomó bajo su protección artística, y le ofreció a él y a su familia una casa en Barcelona. Allí es donde compuso la mayor parte de sus más famosas obras.