Fernando Abril Martorell

1936 /// 1998
Político

Concordia y tesón

Francisco Puchol-Quixal y de Antón

Abogado

Fernando Abril Martorell, ingeniero agrónomo y economista, fue uno de los políticos españoles que más ha aportado a la convivencia. Conviene saber que no se trataba de un clarividente, sino que contaba con unas dotes especiales para el entendimiento y el compromiso, para hacer posible la ‘Paz, piedad y perdón’ de Azaña. Tenía el Estado en la cabeza y la cabeza bien trabajada.

Sus años en el Gobierno realmente son lustros o décadas. Aquellos setenta eran años de 48 meses, con meses de 100 días. Aquellos días, casi como ahora, dilataban más de 24 horas. Muchos de los que lean esto no habían nacido, por lo menos mis hijos. Eran los tiempos de la Ley de Reforma Política, de legalizar al PC, las elecciones del 15 de junio de 1977, los Pactos de la Moncloa, asesinatos de ETA, de desatascar un texto Constitucional. Y todo gobernando con dos crisis económicas, reflotando sectores industriales, conformando una clase sindical y empresarial… Porque todo había que crearlo y Fernando era decisivo. Capacidad de trabajo, arrestos para afrontar todos los compromisos, lealtad a Adolfo Suárez y sus ideas. La historiadora Patricia Gascó, estudiosa de la UCD valenciana, señala la importancia de Fernando Abril en toda la política de aquella época. Estudió en Madrid, se casó con una maravillosa segoviana, Marisa Hernández, madre de sus 6 hijos, y se instaló en Segovia y luego en Madrid -por cierto, siempre en el mismo piso de Padre Damián-, pero todos los años volvía a Valencia a ver a su familia y amigos.

Se sintió valenciano siempre; desde cuando en sus primeras elecciones en Segovia le llamaban «el valenciano», según cuenta Antonio Lamelas en ‘La Transición en Abril’; hasta cuando en su último cumpleaños, sabiéndolo ya último, todo fue paella, falla, música y pólvora. Consiguió la Bolsa para Valencia, dándonos rango financiero como Madrid, Barcelona y aun Bilbao. Él no hubiera consentido la desaparición de nuestro sistema financiero. Algo hubiera hecho. Como ante el tránsito de naranjas deMarruecos. Reflotó Unión Naval de Levante y la presidió desde 1983 hasta 1998. Salió de una sesión de quimioterapia para viajar a Valencia a atender a las familias afectadas por el trágico desastre del ‘Proof Spirit’ en julio de 1997. Sindicalistas como Rafael Fernández recuerdan su empeño por salvar aquella joya de la corona industrial valenciana. Su presidencia de Aguas de Valencia fue tan ejemplar como la de José Simó.
Recuerda Patricia Gascó que Abril, tras la vicepresidencia, se concentró en los trabajos por el Estatuto de Autonomía de nuestra Comunitat, cuya defensa fue su última intervención parlamentaria, sin contar su clarividente ‘Informe Abril’ sobre la reforma del sistema sanitario.

Hace años la Generalitat le concedió su Alta Distinción, hace poco Valencia le dedicó una calle y a algún periodista, desde el desconocimiento, le sorprendió que acudieran dirigentes del PSPV. Más debió de sorprenderle que el propio Alfonso Guerra en el Club de Encuentro, como en cuanto tiene ocasión, deje bien clara su admiración por este personaje con el que trabó una amistad que tanto benefició a la sociedad española.

Los valencianos somos muy dados a devaluar lo nuestro, llevamos años entrenándonos en buscar la herida y, más que lamerla, abrirla. Seamos conscientes de nuestras fortalezas, de nuestro papel determinante y siempre creativo. Conozcamos a las personas que han dejado una huella positiva, de ciencia, arte, progreso, concordia, defensa de nuestros valores. La ejemplaridad no puede existir sin reconocimientos. Ah, y uno de los valores que siempre ha parecido converger sobre los que vivimos en esta tierra es la transacción; no analicemos desde el fundamentalismo. Repito el mensaje. Sinónimo de Abril: concordia y tesón. Aprendamos de ello.

  • Fernando Abril Martorell (Valencia, 31 de agosto de 1936 – Madrid, 16 de febrero de 1998).
  • Ingeniero agrónomo, también se doctoró en Ciencias Políticas.
  • Fue nombrado presidente de la Diputación de Segovia en 1969, con Adolfo Suárez como gobernador civil y con quien siempre mantuvo una estrecha amistad.
  • Vicepresidente del Gobierno en dos periodos, ministro de Economía y de Agricultura, senador y diputado por UCD.
  • Presidió Unión Naval de Levante y Aguas de Valencia.